Los chicos del CFI Don Bosco apuestan por la energía renovable y crearon su propio generador eólico
El viento acompañó en la jornada más esperada por los chicos que asisten a diario al Centro de Formación Integral Don Bosco ubicado en el barrio El Frutillar. Allí, entre todos, instalaron un generador eólico que fue diseñado y construido por ellos mismos.
En el marco de un nuevo oficio que se enseña en la institución impulsada por la Asociación de Damas Salesianas, los jóvenes que estudian en el lugar comenzaron a profundizar sobre energías renovables. Durante el ciclo lectivo aprendieron sobre distintos elementos que hacen a la temática, como paneles solares o claves para la construcción de casas sustentables.
Uno de los motores del CFI es aprender mientras se brinda un servicio o se ayuda a la comunidad. Así surgió la idea de trabajar en Corralito, debido además a que fue uno de los lugares elegidos por Cáritas, fundación que ayuda con los presupuestos de los elementos a construir.
“Lo primero que hicimos fue instalar paneles solares para un poblador en Corralito”, indicó Fernando Cémbalo, profesor de Electricidad. Luego siguió la instalación de una turbina para la planta de empaque de huevos de una cooperativa del lugar y también para una fábrica de alimento balanceado.
Luego, con la ayuda de la ONG 500RPM, dedicada a realizar proyectos sociales de capacitación, fabricación e instalación de aerogeneradores de baja potencia en zonas rurales, Cáritas y la Asociación de Damas Salesianas, emprendieron el objetivo de construir un generador eólico.
“Lo importante de esto es que trabajaron todos los chicos de todos los oficios”, señaló el docente y agregó a modo de ejemplo: “los chicos de Carpintería hicieron las aspas, los de Herrería los brazos de palanca y las riendas; los de Electricidad se encargaron de las bobinas de la turbina y los de Mantenimiento hicieron los anclajes”.
Tras varias semanas de arduo trabajo, este jueves instalaron el generador en el patio de la institución. “Vamos a generar electricidad para la estructura. En principio será destinada a la iluminación del exterior”, explicó Cémbalo.
El proyecto además, resultó ganador de un Congreso que se realiza en India. “En octubre nos avisaron que resultamos ganadores”, manifestó el docente con orgullo y agregó que ahora tendrán dos años para probar y monitorear el generador, que en días en que no haya viento utilizará la energía almacenada para seguir en funcionamiento.
El costo de armar el generador fue cercano a los 100 mil pesos. “Nada sería posible sin la ayuda de las Damas Salesianas”, remarcó Cémbalo. El éxito del proyecto se ve claramente plasmado además en que ya tienen pedidos para el próximo año, como por ejemplo, la empresa que explota la represa de Alicurá y pobladores de Corralito y Pichi Leufu.